Autor:

Rev. Daniel Caram

Claramente uno de los principales temas en el estudio de las epístolas de Pablo a los Tesalonicenses es la Segunda Venida de Cristo. En cada capítulo de ambas epístolas encontrará una referencia directa o una alusión a la Segunda Venida de Cristo. El Señor aún tiene una iglesia en Tesalónica, y ellos están a la espera de “Su Venida”. El significado principal de estas epístolas es que todos los creyentes deben estar preparados y vivir en la expectativa de: “¡Mi mundo podría terminarse hoy, y no quiero ser avergonzado cuando me encuentre con Él!”

Debido a la manera de hablar de Pablo en tiempo presente, muchos de los cristianos del primer siglo malinterpretaron lo que Pablo decía concerniente al regreso de Cristo. Llegaron a tales extremos como abandonar sus trabajos y dejar de realizar las funciones normales de la vida diaria. Aunque la segunda epístola de Pablo trajo mayor clarificación, no les dijo algo nuevo. Él simplemente estaba reiterando los puntos que ya les había enseñado durante su breve ministerio en ese lugar (2 Ts. 2:5, 3:10; 1 Ts. 4:2).