Autor:
Dr. Brian J. Bailey
Introducción
1:1-2 – “La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; y la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan, que ha dado testimonio de la palabra de Dios, y del testimonio de Jesucristo, y de todas las cosas que ha visto”. La palabra “revelación” significa destapar, develar o revelar. Los versículos 1 a 2 nos hacen comprender cómo llegó a existir este libro. Dios Padre le dio este libro a Jesús después de su ascensión al cielo.
Cristo dijo en Mateo 24:36 refiriéndose al tiempo de su segunda venida: “Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre”. Dios Padre es el único que sabe con exactitud el día y la hora de la segunda venida de Cristo. Como Hijo del Hombre, la revelación que Jesús tuvo de los últimos días no era completa mientras Él estuvo en la tierra. Tuvo que crecer en conocimiento, igual que nosotros. Sin embargo, después de ascender al Padre, en los cielos, supo todas las cosas. El libro de Apocalipsis fue dado a Jesús por el Padre, quien por medio de un ángel se lo envió después a Juan.